Necesita humedad, por lo que debes mantenerla nebulizada. Si la humedad de tu casa es muy baja, llena un pulverizador manual con agua tibia del grifo y rocía regularmente las hojas sin llegar al racimo central de pequeñas flores.
¡No la ahogues! Ponerle agua en exceso es uno de los errores más comunes, la moderación es clave: riégala sólo cuando la superficie del compost esté casi seca, sin dejar la tierra empapada. El exceso de agua puede provocar la aparición de moho gris en las flores de Pascua y las hace vulnerables a los ataques de plagas comunes como las de cochinillas. Las poinsettias recién compradas no necesitan ser abonadas durante el período de floración, ya que suelen venderse en tierra prefertilizada, ni tampoco ser trasplantadas durante el invierno, por lo que puedes mantenerlas con seguridad en la maceta en la que las compraste.
Bonus tip: Para que vuelva a florecer una vez finalizado el período de floración, deberás alimentarla mensualmente con un abono alto en potasio y bajo en nitrógeno. Asimismo, se ha de mantener en completa oscuridad, entre 12 o 13 horas al día, durante al menos ocho semanas antes de la próxima temporada navideña. Incluso el mínimo rayo de luz impedirá que recupere sus bonitos colores. De ahí que lo más cómodo sea comprar una planta nueva cada año para evitar este verdadero ritual.